viernes, 23 de noviembre de 2012

Reaccionar como rezo


¿Qué puedo decir?
Me he abandonado.
Soy incapaz de luchar contra mis instintos. 
No poseo fuerza de voluntad.

Predico la teoría como el más sabio,
pero mi mundo interior es salvaje, 
inconexo por definición.

Siento pesar al ver mi reflejo,
no me reconozco, no me deseo.

Reaccionar como rezo.

Utopía


No tengo un cuarto bonito, ni tengo una vida soñada.
No llevo una rutina ordenada, ni uso unos sentimientos rígidos.
No puedes esperar nada de mí. 
No te puedo prometer nada, porque no tengo el control sobre mí.

Intento ser sincero y asimilar cada paso que doy,
pero doy tantos en falso que cuesta conocerse a uno mismo.

Podría decir que la suerte suele sorprenderme a bandazos.
Inesperadamente los recibo con los brazos abiertos siempre,
tratando de aprender de ellos una lección de vida.

Supongo que siempre será así, nunca dejaré de hacerme el sorprendido.

Cruel fin o vida con experiencia.


¡Me parecéis tan insultántemente atractivos!
Tan llenos de vida, de cosas que enseñar al mundo, 
de personas a las que hacer felices, de ideas claras.
Con un futuro precioso, lleno de deseos cumplidos
de satisfacciones por doquier, de perecer placentero y degustable.

Quizá seáis utopía, o quizá mi realidad diste mucho de la vuestra.

Por siempre pesimista. Yo

Music: Agnes Obel - "Beast"